Vanderbilt Avenue

COMPRAR

Vanderbilt Avenue, de Anna Casanovas

Sinopsis (según Amazon)
El día que Jack cumplió dieciocho años descubrió un secreto que le destrozó la vida. Abandonó Little Italy, a su familia y a sus mejores amigos y se convirtió en lo que ellos más odiaban: un policía. Diez años más tarde, Jack vuelve al barrio para resolver el asesinato de Emmett Belcastro, probablemente el único buen hombre que quedaba sin estar relacionado con la mafia. Pero, el día que por fin vuelve a acercarse a su pasado, conoce a una chica que puede ver dentro de él. Y es la peor chica del mundo.
Tras el brutal asesinato de sus padres, Siena Cavalcanti se marcha a vivir a Estados Unidos con el único pariente que le queda, Luciano Cavalcanti. Siena cree que está a tiempo de salvar a Luciano de sí mismo e insiste en protegerlo. Y si de alguien tiene que defenderlo es del peligroso y enigmático detective que ha aparecido en el barrio.
Jack se juró que no volvería a sentir nada nunca más, pero la atracción que siente por Siena se entromete en todas sus decisiones y solo se le ocurre un modo de controlarla: cediendo a ella. Es una relación peligrosa y adictiva en la que los dos se están utilizando: él, para averiguar los secretos de la familia Cavalcanti y ella, para protegerlos. Jack y Siena creen que lo tienen todo bajo control... hasta que los sentimientos de verdad se entrometen y lo que corre peligro no es solo su vida.
La policía y la mafia de Nueva York tienen sus propias reglas y solo coinciden en una: no te enamores de tu enemigo.

Ha sido mi primera lectura conjunta con Folloner@s y segunda lectura de esta novela. Me gusta como escribe Anna Casanovas, y tras esta lectura sigo pensando lo mismo. 

Fiel a su estilo cuidado y sencillo, nos presenta una historia de amor ambientada en la ciudad de Nueva York en los años 40, en el barrio llamado Little Italy. Lo principal, al tratarse de una novela romántica, es la relación de los dos protagonistas, cómo se conocen, cómo se relacionan y cómo acaban juntos, pero para mí merece mucha más atención la historia que nos cuenta, entre el pasado y el presente, sobre varias familias italianas que emigraron, por distintos motivos, de su país a Estados Unidos. Las pequeñas pinceladas que nos aporta la autora sobre cómo fue ese viaje me han parecido maravillosas, y ha sido cómo he conseguido meterme en esa época. No me hubiese importado conocer más sobre la vida en ese suburbio neoyorquino. Puede que os parezca una tontería, pero he echado en falta el humo del tabaco. Me da la impresión de que en esa época se fumaba mucho y cualquier mafioso o policía duro que se preciase debía fumar (en mi mente tengo la película Casablanca).

Tenemos varios personajes rondando a nuestros dos protagonistas; algunos con más o menos presencia, pero todos esenciales para la construcción de la historia. Te enamoras de ellos, no sólo de Jack y Siena, sino también de Nick, de Luciano, de Catalina e, incluso, de Toni. También tienes a Sandy que aunque no aparezca es uno de los personajes principales y está presente en Jack y en Nicky, y en su manera de actuar.

No busques al leer esta novela una novela histórica, realista y fiel a la época, sino una historia de amor, a priori imposible, entre la sobrina del capo de la mafia italiana y un policía que creció en el barrio y que traicionó a todos al hacerse policía, con sus momentos intensos entre los dos, luchando por evitar lo inevitable.

Anna consigue dejarte la miel en los labios sobre la historia de Nick y la de Sandy, así que si lees el primero, leerás los demás.







Comentarios

Publicar un comentario

Unlimited

Entradas populares de este blog

Me olvidé de mí

Piso para dos, de Beth O'Leary

¿A quién teme el diablo?, de Pablo Palazuelo

La solterona, de Jana Westwood #PremioLiterario2018

Sólo mía, de Elizabeth Lowell (Only #2)

El diablo también se enamora, de Eleanor Rigby

Tan cerca del horizonte, de Jessica Koch

El último día de mi vida, de David Orange #PremioLiterario2018

El hombre fetichista, de Mimmi Kass #retoíntimo

El señor de la guerra, de Elizabeth Elliott