La gravedad que nos atrae, de Brittainy C. Cherry

Graham Russell es un escritor de éxito, pero está atrapado en un matrimonio infeliz y nunca ha conocido el amor de verdad.
Hasta que Lucy, una joven florista, llega a su vida.
Poco a poco, la gravedad ejercerá su poder de atracción y Lucy sanará las heridas del pasado de Graham.

Por fin he leído el último de la serie de Los Elementos. Esta maravillosa serie está formada por los siguientes libros:

- El aire que respira
- El fuego que nos une
- El silencio bajo el agua
- La gravedad que nos atrae

Son historias totalmente independientes, cuyo nexo de unión está relacionado con ese elemento al que hace referencia el título y que va unido directamente a cómo se entiende el amor en cada uno de ellos.

Dejando a un lado que, como es lógico, cada historia es diferente, tanto en argumento como en construcción, y que hay algunas que me han gustado mucho más que otras, la verdad es que son cuatro novelas que merece la pena leer, sobre todo si nos centramos en la primera y en la última. Creo que ha sido así para mí porque son las dos más adultas, con personajes que se encuentran en momentos vitales dramáticamente intensos.

La gravedad que nos atrae cuenta la historia de un encuentro entre dos personas muy diferentes pero a la vez necesitadas, que aprenden a aceptar su pasado, su bagaje, y a vivir con él; cuenta el camino que recorre alguien para perdonarse; cuenta el dolor que produce la persona que tenía que quererte y cuidarte; habla de enfrentarse a la vida tal cual se presenta y de tirar hacia adelante; habla de buenas personas. La gravedad que nos atrae es un texto lleno de sentimientos, desde el dolor y desde la cura de ese dolor, con una relación maravillosa que se establece entre los dos personajes protagonistas, con su manera de acoplarse, con diálogos rápidos que en algún momento pueden incluso provocarte una risa, debido al carácter distante o nada empático de Graham, que choca con la manera de entender la vida que tiene Lucy.

Lo primero que me sorprendió es que es corto, o si no lo es, esa es la sensación que se me ha quedado a mí tras terminarlo. Lo leí en en una tarde de esas de sofá y manta que tanto nos gustan. Me ha parecido una historia bonita y tierna, a la vez que está llena de verdad, con esa manera de encontrarse los dos, que puede ser divertida y entrañable, pero que a veces tiene palabras duras por la rabia que genera. Imaginad si juntas a una persona que siente todo con una que no siente nada. Es como si la autora quisiera darles su oportunidad.
Solo porque sonríes y actúes con libertad no implica que la jaula no exista. Solo significa que has bajado tus estándares sobre lo lejos que te permites volar.
No te deja ver el dolor de primeras, que lo hay, como en todas las novelas pertenecientes a esta serie. Es ese dolor que guardan los personajes dentro, pero tú sabes que tienen un pasado importante, de peso. Recuerdo que en El fuego que nos une nos cuentan el pasado pero, en este, algo te dejan caer, dejándote a ti el trabajo de construirlo.
—La soledad es una mentirosa —dijo Graham, que se sentó en el borde de la cama mientras hablaba—. En general es tóxica y mortífera. Fuerza las personas a creer que están mejor con el propio demonio que solas, porque, en cierto modo, estar solo significa que has fracasado. En cierto modo, estar solo significa que no eres lo bastante bueno. Así que, muy a menudo, el veneno de la soledad se filtra y hace que las personas crean que cualquier tipo de atención debe significar amor. Un amor falso construido sobre una cama de soledad fracasara. Que me lo pregunten a mí. He estado solo toda mi vida.
No he sido capaz de parar de leer, una vez que empecé. Aunque tiene ese toque de felices para siempre, eso no ha desmerecido la intensidad con la que he vivido las palabras que la autora ha plasmado para permitirme conocer a estos personajes; a él, a Graham, que es el ser que está triste, está solo y arrastra mucho peso detrás; y a ella, a Lucy, y esa luz que desprende y que le impide dejar de buscar, y en cuyas acciones también se muestra su vulnerabilidad

Quería echarlo de menos.
Quería amarlo.
Quería odiarlo.
Quería perdonarlo.
Sin embrago, no sentía nada.

Podría haberse complicado más la trama, pero quizá hubiera sido paja añadida a una historia de amor tan bonita, tan intensa y ese toque tan maravilloso que te permite que se te quede algo dentro, como esa sensación buena que se te queda tras haber estado llorando.

—Si crees que vas a caer, cae en mis brazos —dijo Lucy con un susurro.
En unos segundos, me encontró la gravedad. Había desaparecido la sensación de estar flotando, ya no me sentía con fuerzas. Empecé a caer, cada vez más deprisa, me vine abajo y esperé a que llegara el impacto, pero ella estaba allí.
Estaba justo a mi lado.
Me sujetó antes de chocar con el suelo.
Se convirtió en mi fortaleza cuando yo ya no podía seguir siendo valiente.

En resumen, dos personas adultas, en una situación límite, que se hacen amigas, que se entienden y que, a pesar de todo, se enamoran. He acabado viendo el dolor a través de los ojos de Graham para luego compartir su fortaleza. Ojalá hubiese más Lucys en el mundo, que vieran la vida de esa manera «rarita», como dice Graham, de ver la vida. No es una gran novela, a modo de gran historia llena de «mucho», pero sí es una historia bonita, que rezuma, como ya os he puesto antes, sentimientos. A mí, me ha encantado.





Comentarios

  1. a mi esta serie me encantó y la disfruté mucho, a parte me encanta como escribe la autora, muy buen post Carmen, me alegro de que te haya gustado

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  2. NO la veo para mi y menos si son cuatro novelas por leer
    Besos

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  3. Me da rabia pero esta autora no es para mí, he leído un par de libros y me han gustado lo justito, las historias me gustan el problemilla que tengo creo que es con el estilo de la autora :/ Pero bueno, no nos puede gustar todo, jeje

    Besinos.

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  4. No termino de verla para mí, así que esta vez la dejo pasar, cosa que la lista de pendientes agradece mucho.
    Besotes!!!

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  5. Holas
    Comparto contigo el detalle que comentas. Para mi los libros con personajes más adultos y que por alguna razón tocaron más mis emciones con el primero y este último y si, coincido un montón contigo, esta autora se lleva la palma al drama, a la gran contrucción de personajes y a sus argumentos tan bellos.
    Un bes💕

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  6. Ojalá hubiera disfrutado tanto con El aire que respiras com tú porque iba predispuesta a ello, pero esta autora no es para mí.

    Un beso

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