La joven del acantilado, de Lucinda Riley

496 páginas

Editor: DEBOLSILLO

Fecha publicación: 10/2013

ISBN: 8490625204

Una figura diminuta y descalza al borde del acantilado, una melena pelirroja que se mueve con las ráfagas de viento, un vestido blanco hasta los tobillos... Así es la niña la primera vez que Grania Ryan la ve. "Si le digo algo podría asustarse y caer, pero igualmente la podría arrastrar el viento", piensa. Grania se ha refugiado en casa de sus padres, en Irlanda, después de que la relación con su novio en Nueva York haya terminado. Allí entabla una íntima amistad con esa niña, Aurora Lisle, y su padre, viudo. Sin embargo, esta inesperada relación reaviva un profundo resentimiento entre las dos familias de cuyo origen nadie quiere hablar. 

Descubrí a esta autora con la historia (historias) de las Siete hermanas. Desde entonces tengo más de un libro suyo por casa. La joven del acantilado llegó a mis manos en una librería de segunda mano de esas en las que te llevas cuatro libros por diez euros. Este verano le ha llegado por fin su turno.

Una historia que comienza con la huida de Grania Ryan de su casa y su pareja en Nueva York a su Irlanda natal, a la granja que sus padres tienen en el pueblecito donde se crió. Allí, regodeándose en su propia desgracia y sin confesarle a nadie qué es lo que ha ocurrido, conoce casualmente a una niña pelirroja y descubre cómo su amistad con esa niña puede volver su mundo patas arriba, así como devolverle seguridad, confianza y pasado, el pasado que ella desconoce de su familia y la familia de esa niña. 

Ha sido una historia que en parte me ha encantado y en parte me ha parecido solo entretenida, según el momento que me estaban contando. Presente y pasado se van conjugando, con varias líneas argumentales que se dan de manera simultánea, para que conozcamos la historia una mujer fuerte y decidida que se hizo a sí misma y que supo hacer frente con honestidad y valor a las dificultades que se fue encontrando por un lado, y cómo esta historia ayuda y empuja a Grania para que avance y solucione sus fantasmas. Además, también conoceremos qué está ocurriendo con su pareja en Nueva York. 

El planteamiento de la trama ha estado muy bien, invitaba a continuar leyendo para averiguar qué ocurría en torno a la vida de esa niña y qué le había ocurrido a Grania para hacerla escapar de su vida y refugiarse en la casa de sus padres; además, la historia del pasado estaba construida justo como a mí me gustan y como más me hacen disfrutar. Lo que ha disminuido un poco mi interés ha sido, por un lado, la parte final, algo previsible y manida (aunque sí he soltado alguna lagrimita, no os voy a engañar), y ese hilo conector, con el toque de realismo mágico, que hubiera aceptado mejor si se hubiese utilizado desde el comienzo del libro y no que apareciese así de pronto, descolocando al lector.

Un libro sobre el pasado y el presente, sobre las relaciones humanas y, sobre todo, sobre los sentimientos y cómo estos nos impulsan a tomar unas u otras decisiones. Es una novela de narrativa femenina, cuyas protagonistas son ellas y su sitio en el mundo. 

A pesar de ese pequeño pero que le pongo, porque no siempre todos nos gusta igual, sigo afianzando a esta autora entre mis predilectas para contar historias a dos tiempos, unidas por lazos de sangre y separadas por años y/o épocas. Ese juego en el que un hecho pasado afecta al presente, me gusta mucho y es un valor seguro a la hora de elegir mi próxima lectura.

 

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