I Café literario de Valencia #evento

octubre 29, 2017

Una tarde de sábado en Valencia, con más calor del esperado para el último fin de semana de octubre, muchas risas, libros y café con galletas, ese sería el resumen del primer Café Literario en Valencia. Espero que este día haya sido el primero de muchos (ya sabemos que el 2 de diciembre tendremos el segundo Café con tres escritores y sus últimas novelas).

El objetivo de este tipo de reuniones, además de coincidir con gente con la que sueles tener contacto, a veces diario, a través de las redes, es descubrir nuevos escritores o nuevas lecturas de escritores que ya conoces. Por lo menos yo lo tomo así.

Para este primer encuentro, las chicas del café (las voy a llamar así a partir de ahora: María, Patricia y María Pilar, y a mi querida Natalia que ayer no pudo estar) nos trajeron tres escritoras, aparentemente de corte distinto pero con una línea en común, que todas escriben romántica.

Laura Girón nos presentó su bilogía Viájame: País de paso y País de destino, y tuvimos la suerte de compartir con ella esa manera tan peculiar que tiene de enfrentarse al folio en blanco trazando una ruta marcada primero por el capítulo final, pasando por uno intermedio y, por fin, comenzando por el principio.

Ella, Helena con hache, no es una persona enamoradiza y lo de pasar página no es su fuerte, las típicas frases post-rupturas como: un clavo saca otro clavo, hay más peces en el río, etc., no funcionan con ella, por ello, lo de volver a enamorarse es un riesgo que no está dispuesta a correr.

Él, Alejandro, es una de esas personas que entran en tu cabeza como una apisonadora. Estar cerca de él es como moverse alrededor de una mina anti-persona, cuando te acercas demasiado, más allá del límite de seguridad establecido, todo salta por los aires, y no puedes hacer nada por evitarlo.

Y llegó el uno de agosto, y antes incluso de saber su nombre, ella ya sabía que se marchaba, aún así acabó enamorándose de él.

Sumérgete en un viaje apasionante por las emociones y sentimientos de Helena, y gracias a Alejandro podrás visitar los lugares más maravillosos del mundo.

¡Nos vemos en la siguiente parada en País de Destino!

Scarlett Butler, autora de siete novelas (espero no equivocarme) nos demostró que una profesora de inglés, muy romántica y soñadora, puede salir de su zona de confort y atreverse esta vez con una novela new adult, donde una chica algo tímida conoce a un chico malo, que puede no ser tan malo.

¿Qué hacer cuando has pasado toda tu vida persiguiendo imposibles?

Keanu, un joven mecánico y guitarrista de una banda de rock en sus ratos libres, arrastra traumas del pasado que se funden con un presente vacío y sin esperanza. April, una chica española de padre norteamericano, sacrifica parte de su vida trasladándose a miles de quilómetros, de donde se ha criado, para ayudar a parte de su familia que está atravesando serios problemas.

Ella está dispuesta a conseguir lo que se propone, aunque un chico a lo James Dean esté constantemente metiéndose donde no le incumbe. Él intentará alejarse de una joven preciosa, dueña de unos ojos impresionantes que invitan a perderse en ellos. ¿Qué ocurrirá cuando ambos sean incapaces de detener el maremoto de sensaciones que está a punto de sacudirlos?

Pasea por playas de arena blanca y azules tan intensos como el cielo, apúntate a clases de surf, disfruta de canciones escritas con alma y corazón, y descubre paisajes idílicos que te harán suspirar.

Una historia de amor, superación y segundas oportunidades que no te puedes perder. ¡No querrás abandonar Ocean River!

Para el final, pero no por ello menos importante, Laura Sanz nos habló de Jan, de Cas, de Till y nos recordó a Robert. Si no sabéis quienes son, estáis perdiendo un tiempo precioso... son los cuatro hombres literarios de Laura. "La reina de la autopublicación", como la llamaban ayer, lleva tres novelas publicadas y tres éxitos. La novela de Till está todavía en producción y tendremos que esperar un poco para conocer la historia del más díscolo de los Landvik

reseña

Con Laura aprendimos que el alemán puede ser un idioma muy romántico, que a veces un grupo espontáneo de turistas en bicicleta, con apariencia de alemanes maduritos, te puede sacar los colores, que en la vida uno puede ser feliz y que las críticas malas se lloran dentro del baño, a puerta cerrada, para luego agradecer con una sonrisa y un simple gracias en las redes.

La lucha de Jan es mi última lectura terminada y ya tenéis la reseña en el blog. A modo de resumen, puedo deciros que es una novela completa, de trama relativamente sencilla, con pocos personajes y pocos escenarios, que Laura consigue una conexión increíble entre los dos personajes protagonistas, sus cuerpos y sus almas, que a pesar de que a la historia le iba algo más de violencia explícita por el tema en el que se mueve la trama, la parte romántica es intensa, íntima y muy especial, y que Jan te llega al corazón, os lo aseguro.

Han pasado ocho meses desde que Jan Landvik, antiguo campeón de MMA, se vio forzado a tomar una decisión: entregarle un año de su vida a Bajram Sejdiu, participando en su circuito de peleas ilegales para poder hacerse cargo de las deudas de juego de su hermano pequeño. Siempre dispuesto a sacrificarse por los que ama, no contaba con que esta vez el precio a pagar iba a ser muy alto… demasiado alto.

Inmerso en esa nueva y destructiva forma de vida, alejado de su familia, endurecido por las circunstancias y tratando de sobrevivir en un ambiente violento… Jan ha comenzado a convertirse en un hombre sin escrúpulos.

Pero el destino, a veces ingrato a veces cruel, va a poner en su camino a una mujer que necesita desesperadamente ser rescatada.
Y eso… va a cambiarlo todo.

Ya me he apuntado el día del siguiente Café Literario en Valencia (2 de diciembre) porque no me lo pierdo. Espero veros a los que podáis por ahí.