Sentido y Sensibilidad, de Jane Austen

Tercera lectura de Jane Austen que realizo en lo que va de año y todo gracias a la lectura conjunta organizada por folloner@s. Es verdad que están siendo relecturas y por eso estoy agradecida. Releyendo disfruto más de la narración, sin preocuparme por lo que ocurrirá porque ya me es conocido.

Con la lectura de La abadía de Northanger descubrí a una Jane Austen increíble, con una manera de exponer y contar una historia demasiado irónica para lo que recordaba y mucho más adulta de lo que me pareció la primera vez que la leí. Con Sentido y Sensibilidad me ha pasado, en cierta manera, lo contrario. He notado mayor juventud, o inexperiencia, en el planteamiento de los hechos y en la construcción de la trama. A veces casi me parecía que se iba por las ramas o que llenaba algunas páginas con información que no era necesaria.

Jane Austen escribió esta novela, o el borrador de la misma, con solo 19 años, y fue su primera novela larga. La publicó 16 años después bajo el seudónimo de A Lady. He descubierto también que la primera vez fue escrita como novela epistolar, un género muy común en la época, y eso me ha intrigado. Luego la cambió, pero a mí se me han quedado unas ganas enormes de leer esta novela a través de cartas. Me imagino esas misivas de Elinor a su madre, a su hermana, de Marianne a Willoughby, esas cartas formales y obligatorias a su hermano, a su cuñada, la falta de cartas a Edward... no sé, es como si en mi cabeza todo cobrara mucho más sentido, toda la trama y la manera de actuar de los personajes. 

Ésta es la tercera vez que leo Sentido y Sensibilidad y ha sido, quizá, la más decepcionante de todas, aunque eso no significa que no lo haya disfrutado. La historia me encanta, me atrapa, no puedo decir lo contrario. La vida que nos muestra Jane Austen, tan normal para ella y tan atrayente y diferente para nosotros, es uno de los puntos fuertes de todas sus novelas. Esa forma en la que nos va presentando un elenco variado de personajes, muy propio de la sociedad de finales del siglo XVIII principios del XIX, con reminiscencias de La Ilustración y acercamientos a la sociedad moderna del siglo de Las luces, es casi como un trabajo psicológico sobre estereotipos muy marcados; y esto es el mayor valor de esta novela. En algún sitio he leído que casi se puede considerar un ensayo psicológico y estoy totalmente de acuerdo.

El enredo existe pero no es tan importante como puede aparentar, lo que sí destaca es cómo coloca a Elinor en el centro de lo que se debe hacer y cómo se debe hacer pero sin encumbrarla a la perfección, ya que también nos muestra sus defectos y, en cierta manera, sus pasiones. Casi es como si nos dijera que podemos sentir, y mucho, pero no debemos dejar que eso afecte a la manera correcta de comportarnos frente a los demás; no debemos perder la compostura y así, al final, es fácil que consigamos lo que anhelamos.

Amores, familia, herencias, matrimonio, educación, mujeres, caballeros, damas, dolor, bailes... nos encontramos con todos esos elementos comunes a las obras de esta escritora, aunque, para mí, no hay una gran historia de amor como sí la hay en Orgullo y prejuicio. Esta novela es distinta. Elinor y Edward tiene amor, pero no sé si lo llamará "gran historia". 

Para terminar sólo me queda hacer un pequeño comentario a modo de reflexión sobre estas novelas. No sé si os pasa a vosotras pero yo echo en falta esas grandes declaraciones de amor que tanto nos gustan. Es verdad que en Persuasión aparece en forma de carta (una de las más maravillosas que yo he leído) pero me queda la duda si es porque ya fue su última novela y veía sus historias de otra manera. Suele dejar a la imaginación del lector esas conversaciones, aún siendo tan buena ella en la ejecución de los diálogos. Me encantaría que alguien experto en la literatura de principios del XIX me dijera si es algo común, si tiene relación con esa prosa más epistolar que narrativa.

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