Ganesh, de Rosario Vila #minirreseña
ASIN: B0849SY62B
Autopublicado
Gema está loca por Edu desde que lo conoció en el gimnasio en el que trabaja de recepcionista. Se cree sus promesas ilusionada, pero después de un año de relación a escondidas empieza a dudar que algún día vaya a divorciarse. Lucha contra su vocecilla interior, quiere a Edu e intenta seguir confiando en él. Pero un día sucede algo que trastoca su día a día: Ganesh abre una tienda justo enfrente de su casa.
Cuando la mujer de Edu entra en la vida de Gema de manera impensable, a Gema empieza a resultarle muy complicado aceptar lo que parece ser una evidencia. Sin embargo, sigue empeñada en que triunfe el amor. Pero Ganesh no se lo pone fácil, porque bajo su negro flequillo y su aparente ingenuidad se esconde un chico exótico, con una genial filosofía de vida y sentido del humor, que enamora.
Creo que ya lo he dicho más veces, pero no os importará si me repito diciendo que conocí a Rosario Vila (sus libros, a ella no la conozco) cuando su novela Patas arriba quedó finalista del Premio Amazon del año 2016. Desde entonces, he comprado varios de sus libros, aprovechando su precio de lanzamiento en digital, y he leído tres de ellos: Patas arriba, Dicen por ahí y, su última novela, Ganesh. No os descubro nada si os digo que escribe eso que llaman chick-lit: comedias contemporáneas, actuales, románticas, divertidas, con una protagonista femenina de unos 30 años que busca encontrar su sitio. Para mí, las historias de Rosario Vila encajan en esta definición, con más parte de comedia de situación que de romance, lo que me permite disfrutar de una buena lectura desenfadada, sencilla y nada pretenciosa.
Juntas en una misma novela a una chica buena, divertida, espontánea, ingenua y con algo de mala suerte en sus relaciones personales, con algunos personajes estrambóticos como pueden ser su compañera de piso, Inma, que tiene un concepto de las relaciones muy curioso, o el pakistaní de enfrente, que siempre sonríe cuando le dice las cosas como son, o la esteticién rusa, directa, bruta y divertida, y algún otro que os recomiendo descubrir, y te sale una comedia sin pretensiones y muy divertida (en algunos momentos, sobre todo al principio, me he reído en voz alta). Ganesh no te va a contar una historia enrevesada y compleja, sino algo muy simple sobre gente normal y buena que, como bien dice el protagonista, parece que no quiere ser feliz al complicarse cuando todo es muy más sencillo.
¿Sabes por qué siempre sonrío? —me preguntó.
—No, eso es exactamente lo que me gustaría saber.
—Bien. Dime, si un problema tiene solusión, ¿por qué llorar? Y si no la tiene, ¿de qué sirve llorar?
Si habéis echado un vistazo a la sinopsis, sabréis que Gema está con Edu, que está casado y no puede dejar a su mujer, y lo ve todos los días en el gimnasio en el que trabaja como recepcionista; todo esto la tiene descolocada y herida, sin saber cómo poder solucionar su vida. Gema sobrevive junto a su compañera de piso, Inma, en un barrio popular de una gran ciudad, y un día conoce a alguien que cambiará su manera de ver las relaciones. Los personajes se van radicalizando a medida que avanzamos en la lectura para nuestro divertimento y para el aprendizaje de la protagonista, quien además es la narradora.
El personaje más divertido ha resultado ser Inma y su filosofía de vida, comiéndose a Gema en muchos momentos. Además, si bien ella, Gema, la protagonista, simboliza la búsqueda continua de la felicidad metiendo la pata continuamente y cometiendo un error tras otro, Ganesh refleja lo bueno, lo sencillo, lo positivo, el mirar la vida con ganas, con alegría.
Supongo que la única pega que le puedo poner a la trama es que en ningún momento he estado convencida de que ella estuviera enamorada de Edu, por mucho que nos lo repita, llegando a algunas situaciones absurdas, alejadas de lo que cualquiera de nosotras haría. Ganesh es el pequeño viaje de Gema, pasando de ese estado de tontería casi perpetua, en el que su vida es un desastre, a coger las riendas, ser más positiva para dejar que le ocurran cosas buenas.
—Debes tener cuiddado con el poder de la mente —me dijo Ganesh—. Lo que somos hoy es a causa de lo que pensamos ayer, y los pensamientos que tenemos ahora desidirán nuestro mañana.
No sería sincera si no dijera que la historia es demasiado sencilla, aunque creo que consigue el objetivo que busca: que te rías un rato, que disfrutes de la variedad de personas que nos podemos encontrar y que aprendas que aceptando a cada uno como es puedes tener grandes amigos o grandes amores, o las dos cosas. La historia no tiene ningún tipo de drama, es tierna, es divertida y se lee de un tirón, con algunas situaciones de esas que podemos llamar absurdas pero que podrían ser reales.
Quizá haya echado en falta más desarrollo en la historia de amor (me hubiera gustado más de ellos, no puedo evitarlo), pero la realidad es que no es una novela romántica sino una comedia, y en eso no se ha equivocado la autora.
Por cierto, coincido con otros lectores en lo que se refiere a Inma y a su falta de filtros; se merece ser protagonista de su propia historia. Sería muy, muy divertida.
Creo que ya lo he dicho más veces, pero no os importará si me repito diciendo que conocí a Rosario Vila (sus libros, a ella no la conozco) cuando su novela Patas arriba quedó finalista del Premio Amazon del año 2016. Desde entonces, he comprado varios de sus libros, aprovechando su precio de lanzamiento en digital, y he leído tres de ellos: Patas arriba, Dicen por ahí y, su última novela, Ganesh. No os descubro nada si os digo que escribe eso que llaman chick-lit: comedias contemporáneas, actuales, románticas, divertidas, con una protagonista femenina de unos 30 años que busca encontrar su sitio. Para mí, las historias de Rosario Vila encajan en esta definición, con más parte de comedia de situación que de romance, lo que me permite disfrutar de una buena lectura desenfadada, sencilla y nada pretenciosa.
Juntas en una misma novela a una chica buena, divertida, espontánea, ingenua y con algo de mala suerte en sus relaciones personales, con algunos personajes estrambóticos como pueden ser su compañera de piso, Inma, que tiene un concepto de las relaciones muy curioso, o el pakistaní de enfrente, que siempre sonríe cuando le dice las cosas como son, o la esteticién rusa, directa, bruta y divertida, y algún otro que os recomiendo descubrir, y te sale una comedia sin pretensiones y muy divertida (en algunos momentos, sobre todo al principio, me he reído en voz alta). Ganesh no te va a contar una historia enrevesada y compleja, sino algo muy simple sobre gente normal y buena que, como bien dice el protagonista, parece que no quiere ser feliz al complicarse cuando todo es muy más sencillo.
Juntas en una misma novela a una chica buena, divertida, espontánea, ingenua y con algo de mala suerte en sus relaciones personales, con algunos personajes estrambóticos como pueden ser su compañera de piso, Inma, que tiene un concepto de las relaciones muy curioso, o el pakistaní de enfrente, que siempre sonríe cuando le dice las cosas como son, o la esteticién rusa, directa, bruta y divertida, y algún otro que os recomiendo descubrir, y te sale una comedia sin pretensiones y muy divertida (en algunos momentos, sobre todo al principio, me he reído en voz alta). Ganesh no te va a contar una historia enrevesada y compleja, sino algo muy simple sobre gente normal y buena que, como bien dice el protagonista, parece que no quiere ser feliz al complicarse cuando todo es muy más sencillo.
¿Sabes por qué siempre sonrío? —me preguntó.
—No, eso es exactamente lo que me gustaría saber.
—Bien. Dime, si un problema tiene solusión, ¿por qué llorar? Y si no la tiene, ¿de qué sirve llorar?
Si habéis echado un vistazo a la sinopsis, sabréis que Gema está con Edu, que está casado y no puede dejar a su mujer, y lo ve todos los días en el gimnasio en el que trabaja como recepcionista; todo esto la tiene descolocada y herida, sin saber cómo poder solucionar su vida. Gema sobrevive junto a su compañera de piso, Inma, en un barrio popular de una gran ciudad, y un día conoce a alguien que cambiará su manera de ver las relaciones. Los personajes se van radicalizando a medida que avanzamos en la lectura para nuestro divertimento y para el aprendizaje de la protagonista, quien además es la narradora.
El personaje más divertido ha resultado ser Inma y su filosofía de vida, comiéndose a Gema en muchos momentos. Además, si bien ella, Gema, la protagonista, simboliza la búsqueda continua de la felicidad metiendo la pata continuamente y cometiendo un error tras otro, Ganesh refleja lo bueno, lo sencillo, lo positivo, el mirar la vida con ganas, con alegría.
Supongo que la única pega que le puedo poner a la trama es que en ningún momento he estado convencida de que ella estuviera enamorada de Edu, por mucho que nos lo repita, llegando a algunas situaciones absurdas, alejadas de lo que cualquiera de nosotras haría. Ganesh es el pequeño viaje de Gema, pasando de ese estado de tontería casi perpetua, en el que su vida es un desastre, a coger las riendas, ser más positiva para dejar que le ocurran cosas buenas.
—Debes tener cuiddado con el poder de la mente —me dijo Ganesh—. Lo que somos hoy es a causa de lo que pensamos ayer, y los pensamientos que tenemos ahora desidirán nuestro mañana.
No sería sincera si no dijera que la historia es demasiado sencilla, aunque creo que consigue el objetivo que busca: que te rías un rato, que disfrutes de la variedad de personas que nos podemos encontrar y que aprendas que aceptando a cada uno como es puedes tener grandes amigos o grandes amores, o las dos cosas. La historia no tiene ningún tipo de drama, es tierna, es divertida y se lee de un tirón, con algunas situaciones de esas que podemos llamar absurdas pero que podrían ser reales.
Quizá haya echado en falta más desarrollo en la historia de amor (me hubiera gustado más de ellos, no puedo evitarlo), pero la realidad es que no es una novela romántica sino una comedia, y en eso no se ha equivocado la autora.
Por cierto, coincido con otros lectores en lo que se refiere a Inma y a su falta de filtros; se merece ser protagonista de su propia historia. Sería muy, muy divertida.
Ay pues por una vez y sin que sirva de precedente, creo que voy a ir a por ella ya mismo. Porque aunque el roolo chik lit sea de mis predilectos, este me ha llamado la atención por tu reseña.
ResponderEliminarUn abrazo
Que buena pinta tiene Carmen, me va este tipo de lectura, la tendré en cuenta guapa. besos y buen post
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