Corazones en el café

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Corazones en el café, de Rita Morrigan

Sinopsis (según Amazon)

Tras haber sufrido un desafortunado percance, Lena vaga por las calles de una ciudad enorme y desconocida en el otro extremo del mundo –Buenos Aires–, mientras se pregunta en qué momento esa escapada le pareció una buena idea.

Quizás después de haber recibido un vídeo en el que su prometido retozaba con la stripper que amenizó su despedida de soltero. O tal vez tras la última discusión con su madre, una mujer muy conservadora, cuando le anunció que había decidido cancelar la boda. Era un hecho: necesitaba alejarse de Madrid y de una vida perfecta y organizada que se había ido al traste. Lo que no imaginaba era que se encontraría en la situación en que ahora se encuentra, sin dinero y sin saber qué hacer.

Cansada, asustada y hambrienta, Lena baraja la posibilidad de darse por vencida y regresar. Cuando está a punto de rendirse, un delicioso aroma la saca de su ensimismamiento y la conduce hacia un pintoresco café de barrio, atendido por un joven bastante impertinente que, al igual que todo en aquel lugar, resulta ser mucho más de lo que aparenta. 

Corazones en el café es una novela plena de humor y emociones, que se lee con deleite y que como el mejor café, deja un muy buen sabor de boca. Una historia de amor diferente y difícil de olvidar, cuyas cualidades la han hecho merecedora del VII Premio Vergara-El Rincón de la Novela Romántica.

La lectura del Club de Romántica y Erótica de Valencia del mes de enero ha sido esta novela, que como habéis leído en la sinopsis, es la ganadora del VII Premio Vergara - Rincón de la Novela Romántica. Atraídas por el prestigio de este premio dentro de las novelas románticas y también por el color de la portada, elegimos democráticamente que ésta sería nuestra siguiente lectura.

Ha sido una lectura pausada, romántica y sin sobresaltos, donde la dulzura de la historia, la genialidad de los personajes secundarios que crean un entorno entrañable alrededor de los protagonistas y el mensaje positivo que trasmite la convierten en una buena lectura sobre el amor verdadero e incondicional, ese que durará toda la vida. 

Ambientada en su mayoría en Buenos Aires, en un café de la parte antigua de la ciudad y en un tipo de vivienda llamada conventillo. Ha sido bonito vivir la historia en ese lugar, imaginándome el día a día de Lena en el café. Es verdad que no he tenido presente durante mi lectura que estaba en Argentina, me ha faltado más ambientación en ese aspecto, excepto en la parte final, en la que se acentuaba la manera de hablar típica de allí. 

No busquéis intensidad en esta novela, pero sí amor, amistad, vida y sueños. Creo que al final el mensaje es ese, que todos somos capaces de alcanzar nuestros sueños o al menos nos debemos a nosotros mismos intentarlo. 

La novela está contada en tercera persona y en su mayoría desde el punto de vista de Lena, así que descubrimos la historia según su punto de vista, aunque la autora se reserva, gracias a ese recurso narrativo de narrador omnipresente, darnos pinceladas de los pensamientos de algunos de los personajes secundarios. Sólo al final tenemos un capítulo desde la visión de él, y la verdad, lo he agradecido enormemente... bueno, más que agradecerlo, lo necesitaba. 

Es verdad que es una novela sencilla, de esas que parece que están bañadas en azúcar, con un tono de que todo puede ser maravilloso, y es verdad que todo eso puede parecer previsible o llena de clichés, pero me ha gustado. He disfrutado con esta historia de búsqueda de uno mismo y encuentro del amor. Me ha gustado porque te muestra que en la vida pueden ocurrir cosas increíbles donde menos te lo esperas, que en la sencillez de las cosas está la grandeza de nuestra existencia, y que la familia también es aquella que encuentras en tu camino y que haría cualquier cosa por ti.