El perdón según Marcos, de Norma Estrella
Marcos conoció la violencia y el miedo desde pequeño. Aprendió a esconderse cuando su padre volvía gritando a casa y a no hacer preguntas cuando su madre ocultaba la cara. Hasta que se cansó. Su madre rezaba y le decía que debían perdonar, pero los niños aprenden con el ejemplo y Marcos aprendió que los puños eran más efectivos que los rezos. Miriam creció en Palmira. Sus padres le enseñaron a respetar el legado cultural de las civilizaciones milenarias que florecieron entre el Tigris y el Éufrates. No entiende conceptos como frontera o nación, pero cuando un grupo armado destroza el trabajo de sus padres y estalla la guerra en Siria, tiene claro de qué lado está: del de las víctimas. Las vidas de Marcos y Miriam se cruzan en Alepo, un lugar que muchos definirían como el infierno en la tierra, pero hasta en los lugares más dejados de la mano de Dios la luz y la esperanza logran abrirse camino, siempre y cuando se luche por ellas. La primera lectura del año viene acompañ